Recibiendo Sanidad a través de los
Dones del Espíritu Santo
En 1 Corintios 12:9 dice: “. . . y a
otro, dones de sanidades por el mismo espíritu.”
Este es un método distinto a los que
hemos estudiado; en este método no depende de la fe de la persona sino de Dios.
¿Qué son los dones de sanidades?
Son manifestaciones sobrenaturales del
poder sanador de Dios que fluyen de un individuo a otro.
Todas las cosas que recibimos de Dios son
dones. Por eso, en cierto sentido toda sanidad es un don; pero no toda sanidad
es una manifestación del Espíritu. Las manifestaciones del Espíritu son
iniciadas por el Espíritu Santo.
Debemos notar que este pasaje nos habla
de dones de sanidades, es decir nos habla en plural. Esto quiere decir que hay
un tipo de don para cada enfermedad.
Por ejemplo hay ministros que tienen una unción
especial para casos de vista, y en sus campañas casi todos los ciegos o gente
con problemas de visión son sanados; otros con problemas de huesos, o de
tumores, o cualquiera sea la enfermedad.
En mi caso, yo veo cada vez que ministro personas con piernas más cortas que la otra casi el 100% son sanados.
La clave es llegar a entender la unción que hay sobre nuestras vidas y cedernos a ella.
Una característica de los dones del Espíritu es que muchas veces vienen acompañados de
otros, como la Palabra de Conocimiento (una porción del conocimiento de Dios
respecto a eventos pasados o presentes) o el Discernimiento de Espíritus (una
visión en el mundo espiritual respecto a los espíritus que sean de Dios, sean
humanos, ó del diablo).
En mi ministerio, he visto este don, a
través de la Palabra de Conocimiento, muchas veces sabia que parte del cuerpo
de la gente estaba mal.
Recuerdo un servicio, cuando era pastor
asistente de la iglesia “La Palabra de Fe” de Callao, ciudad portuaria en el
Perú.
Estaba empezando una serie de enseñanzas
basadas en la sanidad divina; después de la adoración, empecé a sentir las
zonas del cuerpo en que la gente estaba enferma, mucha gente fue sanada de
diversas enfermedades. Al final de la predica, cuando se hizo el llamado para
sanidad, no había ningún enfermo, todos habían sido sanados.
En Hechos 8:5-8 vemos los dones de
sanidades en acción en el ministerio de Felipe, el evangelista: “Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad
de Samaria, les predicaba a Cristo. Y la gente, unánime, escuchaba atentamente
las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo las señales que hacía. Porque de
muchos que tenían espíritus inmundos, salían estos dando grandes voces; y
muchos paralíticos y cojos eran sanados; así que había gran gozo en aquella
ciudad.”
Notemos que aquí dice que las sanidades
eran de cojos y paralíticos. Evidentemente Felipe tenía dones de sanidades para
las enfermedades específicas de parálisis y cojera.
Los dones de sanidades, son
manifestaciones específicas de sanidad, para gente específica, con necesidades
especificas, en momentos específicos.
La gran evangelista Kathryn Kuhlman,
tenía muchos de estos dones en sus reuniones. Dios le daba palabra específica,
acerca de enfermedades que tenia la gente.
Los dones de sanidades, son sanidades que
Dios inicia; y ocurren cuando el Espíritu Santo desea